lunes, 17 de diciembre de 2007

This is the noise that keeps me awake my head explodes and my body aches!!


No puedo escuchar nada. La música esta demasiado alta. Cierro los ojos y el mundo se detiene. Sólo puedo sentir es ritmo frenético de banda escocesa. Ese estribillo vuelve a sonar. Un mundo eléctrico virtual me separa de la realidad, me protege de ella. La fría realidad. La ingrata que te devuelve tus esfuerzos convertidos en puñetazos en la boca del estómago. Me siento pesado, ese filete de pescado a la veracruzana era demasiado heavy. Sólo espero al próximo avión y a que la vida se acabe. Ahora suena Simply Red y me trae recuerdos…recuerdo su disco Stars que me D. prestó cuando estábamos en el instituto. Fue una primera aproximación al mundo exterior que en aquella época no se extendía más allá de 50 kilómetros a la redonda. Ahora el mundo ha encogido. Quizá seamos nosotros los que hemos crecido o puede que las dos cosas hayan ocurrido al mismo tiempo. El espacio se reduce, el aire se calienta y todo es como tiene que ser. Nada nos sobresalta. Nada menos ella. Ella que aparece fugazmente en nuestras vidas, nos emociona, nos hace creer que hay futuro para después arrancarnos las esperanzas de cuajo. Vive lejos pero no lo suficiente como para que no pueda nadar hasta allí si se que ha dejado una ventana abierta por la que puedo entrar.

Ni siquiera hubo un mísero beso, Casi ni nos conocíamos pero se estableció cierta empatía, química, atracción inexplicable como las de las canciones. ¿Por qué nos gusta una canción? Por qué es capaz de emocionarnos? Entra en nuestras entrañas, agita nuestros humores, revitaliza nuestros fluidos y después se marcha. Como también ella también se marchó, dejando a su paso un territorio desértico, un lugar inhóspito en el que nadie podrá jamás entrar ya. Un corazón en paro, un alma reacia a sentir porque cada vez que lo intenta le levantan las uñas, le golpean sin dejar marcas físicas… solo su memoria lo guarda todo. Lo bueno y lo malo. Y surge el miedo. Y uno llega a pensar que no hay futuro.

Las cucarachas tienen un ciclo vital más completo que el mío y eso me acompleja (ellas se reproducen). Sólo porque haya reglas, no significa que el juego sea limpio. Estoy cansado de ser el único que sigue las normas aquí. El que intenta no hacer daño y resultar golpeado. No pasa nada. Sé que no cambiaré y también se que mi ánimo es inquebrantable cuando me lo propongo. Es una de las pocas cosas que la vida me ha enseñado. Eso, y que hay dos tipos de vendedores, los que ya te chingaron y los que te van a chingar y que los vendedores son personas porque todos vendemos algo. Vendemos casas con vistas a la playa, buen rollo, promesas de futuro, semen, planes de hacer una familia, ilusiones… porque de ilusiones vive el tonto de los cojones. Y somos más tontos de lo que pensamos porque no controlamos nuestras vidas. Con lo fácil que es hacerlo, pandilla de ineptos bípedos.

Así que nada. Voy a montarme en ese avión. Me pasaré un par de horas ahí dentro. Quizá me amotine, quizá me duerma o puede que me de por bajar la ventanilla para agarrar algún cuervo, o alguna paloma de la paz y estrangularla. Escuchar como sus vértebras cervicales hacen “crack” con el giro de mi mano, cómo sus patitas dejan de moverse y cómo su cabeza desplumada cae cuando la suelto. La tiraré. Yacerá en el suelo eternamente hasta que a alguien le de por recoger sus restos y ponerlos en un museo. Aquí yace un símbolo pérfido de algo que nunca existió entre los seres humanos.

Quisiera ser más listo, romper corazones, cuellos de paloma, y contratos con distribuidores pero la vida me ha hecho bueno. Ser bueno es ser tonto. Así que definitivamente eso es lo que soy. Un tonto, un lerdo que vive de ilusiones.

Cuando el MP3 reproduzca otra canción que no sea de Annie Lennox, seré feliz de nuevo!

11 comentarios:

Gaby dijo...

Ánimo mi Luis... No tengo la más remota idea de que fue lo que desencadenó esto, pero lo único que puedes hacer es seguir adelante. Si la gente te decepciona, si algunos se aprovechan de tu bondad... Pienso que que la solución no es volverte igual de malo que ellos. Pues en el fondo vas a sentirte peor. Te mando un fuerte abrazo desde aquí y ¡mucho ánimo hombre!.

Luis dijo...

Esta reflexión fué un ejercicio de escritura casi autómática al que no hay que dar mayor importancia..era tarde, un aeropuerto pequeño y perdido de la mano de Dios..algunas malas noticas, poca batería en el portátil y música demasiado alta... una especie de subidón emocional ambientalmente condicionado. Qué diagnóstico más preciso. Un valle en la montaña rusa, justo antes de tomar carrerilla para subir.
Un saludo,

Isabel Sira dijo...

Uff, qué intenso. Leo tu comentario y veo que te pasa como a mí, que dejas correr los dedos sobre el teclado y, bueno... En cualquier caso, soy buena y no creo que por ello sea tonta, ni que lo seas tú. Los tontos son los otros...

manijeh dijo...

No tiene nada de malo ser bueno, más bien todo lo contrario, pero muchas veces comparto esa frustración que describes.

Unknown dijo...

Y me pasa lo mismo. Soy buena y soy pendeja. Hago lo que sea necesario para hacer felices a los demás, aunque no se den cuenta. ¿Sabes qué pasa si un día te levantas y crees que un poco de agradecimiento no te caería mal? Te tildan: chantajista, convenciero, hipócrita. Chingón...

Sk@ dijo...

Eyyyy!!! Abrá que sacudirte un poco... ehhh... nada de tonto... Demasiadas emociones juntas en un corazón que no te cabe en el pecho!!! ".... todo pasa y todo queda... pero lo nuestro es pasar... pasar haciendo caminos... caminos sobre la mar...." Un abrazo muy fuerte y mucho ánimo!!!

Mariana dijo...

Creo que este ejercicio que nos compartiste es una excelente muestra de tu ser sensible. ¡Gracias por compartirte así!

¡Besos tronados!

Mariana.

P.D.1. Me da gusto que seas bueno y rompas cuellos de palomas.

P.D.2. ¡Gracias por tu comentario en mi blog! ¡Hiciste mi día sin darte cuenta!

Tamaruca dijo...

Es que Annie Lenox es sólo apta para masoquistas emocionales. No obstante, a mí me gusta mirarlo de otro modo... ¿En realidad me divertiría rompiendo corazones, cuellos y... y ya? Pues no. Eso no es divertido. Romper contratos y otras cosas así pero, en fin, a veces está muy bien ser una ilusa tonta de los cojones. O de lo que sea ;)

Pinche Vieja dijo...

Ashhhh cntigo!!! ya me iba a sentar a llorar!! ser bueno no es ser tonto... ash, bueno, si pero así somos felices!

PD... y a mis comments... les entiendes???

Besotes!!!!

-- dijo...

Pues sin lugar a dudas tmb soy una tonta... pero es bueno ser tontos, mejor ke ser gandallas...
Me enkanto tu ejercicio!!!

pd. pronto pondré mi foto, es ke no tengo el cable para mi cel =/... pero si nos parecemos jaja...

querida_enemiga dijo...

Ay,qué recuerdos más raros que me trae a mí el Stars. Malos, es su mayoría.